Un pequeño homenaje a José Luis Sampedro
- Sergio Guillermo Valentín
- 12 abr 2015
- 5 Min. de lectura
«Cuando digo Humanidad exagero, porque creo que Humanidad no hay; hay seres humanos. Llevamos dos mil años desde la Antigua Grecia, se ha progresado técnicamente de una manera fabulosa, casi inverosímil pero seguimos matándonos unos a otros, no sabiendo vivir juntos en este planeta. El hombre no ha madurado bastante».
José Luis Sampedro

¿Qué homenajeamos cuando homenajeamos? Algunos dicen que es uno de los nombres de la pereza, que son útiles a la hora de cerrar ciclos, para bautizar etapas, para mostrar ese deseo de perdurarnos en los otros, incluso hay quienes afirman que un homenaje es una burla simbólica dirigida contra la muerte.
Andrés Trapiello escritor y poeta español, ha dicho que un homenaje es como quien levanta cohetes al cielo solo con la idea de darle compañía a las estrellas con otras estrellas; aunque sean efímeras.
En fin, el 8 de Abril del 2013 nos encontramos con la lamentable noticia de que don José Luis Sampedro (como coloquialmente se dice) se nos había adelantado en el camino a sus 96 años; hoy, a dos años de su deceso, trataremos de recordarlo un poco.
Los indignados
El domingo 15 de mayo de 2011, con una serie de manifestaciones por toda España, siendo la más importante en número y repercusión la de la Plaza de Sol en Madrid, surge un movimiento social con bases muy sólidas denominado El Movimiento 15M.
La crisis económica de 2008 venía ampliando el descontento de la sociedad, y por supuesto de los recortes sociales y ayudas públicas a los bancos que acarrea. Esto provocó una gran indignación y un descrédito de las instituciones públicas y de los políticos. "No nos representan" es uno de los lemas que sonaron en esos días. Algunos de los más de 20.000 manifestantes llegaron a acampar esa noche en la plaza de Sol, con la intención de estar allí hasta la próxima jornada electoral, sin embargo, el martes 17 de mayo unos 50 policías entraron en Sol de madrugada, procediendo al desalojo de los acampados y a unos 200 manifestantes.1
A raíz de esto, se decide volver a tomar la plaza por la tarde de ese mismo día, el 20 de mayo, la Asamblea decide por consenso las propuestas y objetivos del Movimiento 15M y surgen entonces los indignados; se presume que un libro escrito por Stéphane Hessel en 2010 titulado ¡Indignaos! (Indignez-vous ! en el original en francés), fue quien inspiro a miles de españoles para que aceptaran ser llamados así, y a partir de esto buscar conjuntamente los cambios necesarios para su bienestar. La edición en español del mencionado libro, está prologado José Luis Sampedro, quien, desde mi punto de vista, se convertiría en un líder moral del movimiento.
¡INDIGNAOS! Luchad, para salvar los logros democráticos basados en valores éticos, de justicia y libertad prometidos tras la dolorosa lección de la segunda guerra mundial. Para distinguir entre opinión pública y opinión mediática, para no sucumbir al engaño propagandístico. "Los medios de comunicación están en manos de la gente pudiente", señala Hessel. Y yo añado: ¿quién es la gente pudiente? Los que se han apoderado de lo que es de todos. Y como es de todos, es nuestro derecho y nuestro deber recuperarlo al servicio de nuestra libertad. (Fragmento del prólogo hecho por Sampedro a ¡Indignaos!)
La mente lúcida más joven de España
Fue un economista, escritor y humanista español que luchó durante gran parte de su vida por una economía “más humana, más solidaria, capaz de contribuir a desarrollar la dignidad de los pueblos”.
Con más de 90 años de su existir, José Luis Sampedro era un personaje "muy querido por el 15M", no creían que fuera su "ideólogo" -si los tuviera, el 15M no sería el 15M-. Sin embargo su presencia simbólica era fundamental para muchos de los integrantes del movimiento. Sampedro se unió al 15M antes del 15 de Mayo de 2011. Un día antes, escribió una carta a uno de los grupos que convocaron la manifestación que comenzó el movimiento, Democracia Real Ya.2 Fue el primer gran intelectual español en apoyar sin ambages el nuevo movimiento social, sin duda dotó de una gran fuerza a la generación que se incorporaría al movimiento, una muy joven generación descubrió a Sampedro en su última etapa como pensador y economista. Muchos se sorprendían al saber que también había sido, entre otras mil cosas, un novelista de éxito.
También influyo a través de la vía de la enseñanza.
“¿La gente está loca?” Se preguntaba el mismo Sampedro, y él mismo se respondía, “por supuesto que no, la gente está manipulada”, y realizaba una fuerte crítica a los medios de comunicación tradicionales que claramente al servicio del poder, tergiversan la información para cambiar la opinión del pueblo, es decir, la opinión pública no existe para Sampedro, existe la opinión mediática.
En sus palabras, hemos sido educados para no pensar, por eso mismo, es obligación nuestra realizar ese trabajo, podemos estar con él o en su contra (así como en otros temas controvertidos en la actualidad), pero esa decisión debe ser tomada a partir de el ejercicio de nuestra propia razón; recordándome un poco al célebre filósofo Immanuel Kant, quien en su ensayo ¿Qué es la Ilustración? nos decía ¡Sapere aude!, una invitación para atrevernos a saber, y que también suele interpretarse como “ten el valor de usar tu propia razón”.
Rescatando su legado
En el primer aniversario de su muerte, Olga Lucas (viuda de Sampedro) presentó Sala de espera, publicado por Plaza & Janés, el libro en el que estuvo trabajando antes de su muerte, una suerte de miscelánea que recoge apuntes biográficos, pensamientos, anotaciones inéditas y su historia de amor con Olga. Un proyecto que dejó inconcluso el escritor, con decenas de notas y apuntes en cajones, con la petición a su viuda de que lo pusiera en claro y lo publicara.
"Que el legado de José Luis Sampedro no se olvide, que su obra se lea y que siga viva, porque es un referente que nos hace mucha falta".3 Esta fue la idea que lanzó Olga Lucas, al presentar el mencionado libro.
No nos queda la menor duda de la importancia de José Luis Sampedro, esa vitalidad, esa lucidez mental que mostró hasta el final de sus días y sobre todo la esperanza que mostraba en cada una de sus conferencias, entrevistas y escritos es contagiada para un sinnúmero de personas, no solo en España, sino alrededor del mundo.
Muchas de sus ideas lo han convertido en un referente para muchos de nosotros, no hay duda de ello, y me queda claro que debemos recordarlo con aquella gran frase que decía cada que podía:
Las batallas hay que darlas. Se puede perder o se puede ganar, pero las batallas se tienen que dar; eso nos ratifica.
1 http://www.movimiento15m.org/2013/07/como-surgio-el-movimiento-15m.html
2 http://madrid.democraciarealya.es/2011/05/15/jose-luis-sampedro-escribe-a-democracia-real-ya/
3 http://www.trotalibros.es/2014/04/el-legado-de-jose-luis-sampedro.html
Agradecimiento y dedicación especial a María Sanz, estudiante universitaria española, actualmente de intercambio en nuestra querida máxima casa de estudios, la UNAM:
Commentaires